viernes, octubre 16, 2009

Folklor Citadino

Pues yo nunca voy para Reforma entre semana y en la tarde, cuando voy es en fin de semana y de noche usualmente paso por ahí para llegar a mi destino, pero hoy fue muy diferente.
Hoy me desperté bastante entusiasmada y agobiada a la vez porque tenía que ir al Auditorio Nacional a ver si aún había boletos en taquilla para Au revoir Simone aunque ya sabía que ya no había decidí ir a darme la vuelta... pero bueno eso es otra cosa.. el punto es que tuve un camino bastante peculiar, vi varias cosas padres, chistosas, raras o no sé como llamarlas....
La primer cosa que paso fue que el perrito que tradicionalmente acaricio todas las mañanas antes de ir a la escuela, por fin estaba limpio! sus dueños al fin se habían responsabilizado de su perro y lo habían bañado, bueno, seguramente lo mandaron bañar, no creo que ellos lo hayan bañado...
Pero bueno...realmente en el camino de ida no pasó nada, creo que lo interesante fue el regreso... era viernes,quincena y hora pico.... bueno en realidad ya siempre es hora pico, pero para ser más específica era la 1:30 pm.

Yo ya había confirmado mi triste sospecha: los boletos de Au Revoir, en verdad estaban agotados, así que me sentía bastante mal y quería regresar a mi casa pero cada vez que quería subir a un camión, toda la gente como animales corría hacia ellos y lo atascaban así que decidí esperar, después de un tiempo me di cuenta que eso no me iba a servir de nada, entonces caminé para alejarme de la multitud y subir antes que ellos y fue una solución bastante simple y efectiva.

Ya en camino, a la altura de Ejército Nacional estuvimos detenidos como 40 minutos... todo gracias a una de las tantas obras de esta ciudad. Pero en esos 40 minutos se subió un señor que vendía Bon Ice (sí, las del pingüinito) y vendió muchísimas. Lo interesante de esto es que no sé si la gente las compro por lástima, por el calor o por el aburrimiento de estar parados sin hacer nada o tal vez por todas las anteriores. Digo por lástima porque el señor que las vendía no tenía el brazo derecho y en su mano izquierda sólo tenía dos dedos (dos de-dos haha) y al menos yo sí la compré porque me dio lástima pero a la vez me dio gusto que aunque no tuviera brazo y demás, el señor estuviera trabajando y no pidiendo limosna como mucha gente en este país. Lo chistoso es que el señor, con el calor de estos días y la caminata, pues olía bastante mal, podías oler su sudor de lejos y aún así nadie le hacía cara de fuchi, todos pretendían que todo estaba bien y le sonreían al señor mientras compraban alegremente su Bon Ice haha.

Ya cuando por fin salimos de Ejército Nacional, vi a una señora manejando un microbus... no es por ser feminista ni nada de esas madres, pero es como raro ver a una ñora manejando un microbus. Es más común ver a una señora manejando un taxi que un microbus y pues está cool, es parte del folklor citadino y me gustó mucho ver eso, me hubiera gustado mucho tomarle una foto pero probablemente hubiera salido borrosa.

Ya después de 1 hora y 40 minutos logré llegar a mi trabajo e inmediatamente me puse a escribir, bueno primero comí y luego ya a escribir.

1 comentario:

  1. no sabia que tenias un blog.

    te agregare a mi lista de blogs en:

    http://bombwave.blogspot.com/ y
    http://chillaxan.blogspot.com/

    (te encanta como con esto espero que tu hagas lo mismo con los dos? es como el capitulo de seinfeld donde vania le da un traje a jerry y luego a huevo quiere que lo invite a cenar pero con blogs y links y asi)

    ResponderEliminar

Tweet